Limones?
Para quien entienda la analogia
Caminando por el centro de la calle, en esa ciudad que tanto conocemos,
Y que para cada quien es tan diferente, como granos de arena,
Siempre nos encontramos con situaciones tan extrañas,
Y jodidamente especiales, que la mano no alcanza
Para escribir el tipo de sentimientos que nos despiertan...
Ese día me encontré en mi camino un limón a media acera,
Es difícil encontrar limones lejos de limoneros,
O de mercados o puestos de frutas,
Ellos no tienden a andar caminando por ahí, y mucho menos
Con una pita y un papelito en amarrado en uno de sus extremos.
No quiero contar historias de mentiras,
Ni a medias, si no estaría escribiendo,
Así que puedo decirles que lo único que hice fue recoger el limón
Y esta vez no fui tan curioso como debí haber sido,
No leí el papelito para evitar tener que llamar a alguien
Por si las dudas, uno nunca sabe quien deja perdido un limón.
Arranque la pita y me la metí en la bolsa de la camisa,
Con todo y papel, quedo guardada ahí,
Y me hice el loco por un momento,
Tome el limón en mis manos y lo sentí
En cierta forma, el hecho de que anduviera de antojo
Y que la limonada sonara para mí, tan deliciosa,
No me hizo pensar ya en el papelito que llevaba en la bolsa.
Cerré los ojos e imagine como sabría mi limón
Como quedaría mejor, sí con mucha azúcar
O sin nada de ella.
Puedo decir que me emocione un tanto con la idea
De la limonada, y del limón, que pensé
En un puesto de limonada,
Que crecería, y crearía puestos de trabajo
Para tantos otros sedientos de limón como lo estaba yo-
Abr los ojos de nuevo, y mi corazón dio un vuelco
Mi limón me mira con ojos bellos,
Nunca había visto que tuvieran ojos, ni nada por el estilo
Lo sorprendente fue como abrió su boca,
Señores, “el limón tenia boca”, y me dijo
LEE EL PAPEL.
Mis manos no quisieron moverse de su lugar
La sorpresa fue tanta, que mis movimientos se quedaron estancados
Pero lo repitió otra vez, y desperté de mi sueño de limonadas
Y de limones parlantes,
Tome el limón en una mano, y sus ojos y boca habían desaparecido
Saque el papelito, jalándolo por la pitita
Y decía con letra grandota,
EL SIGUIENTE LIMON ME PERTENECE
SI LO ENCUENTRA UN DIA DE VERANO
PERDIDO EN UNA CALLE
NO ERA QUE LO HUBIERA PERDIDO
SIMPLEMENTE, QUERIA QUE ME LO DEVOLVIERAN
COMUNIQUESE CONMIGO,
EL LIMON SABRA COMO
Tire el papel, y cerré mis ojos
Quite él rotulo de mi tienda de limonada
Guarde mi antojo en un cajón
Seque las lagrimas de las personas que iban a trabajar conmigo
Y no lloraba porque aun no lo amaba,
Simplemente me frustraba, el sentimiento ese de saber que lo hubiera podido amar
Si no fuera como dice una canción por ahí, TARDE
Si la vida te da limones, antes de imaginarte la limonada. Pregunta si no son de alguien.
Caminando por el centro de la calle, en esa ciudad que tanto conocemos,
Y que para cada quien es tan diferente, como granos de arena,
Siempre nos encontramos con situaciones tan extrañas,
Y jodidamente especiales, que la mano no alcanza
Para escribir el tipo de sentimientos que nos despiertan...
Ese día me encontré en mi camino un limón a media acera,
Es difícil encontrar limones lejos de limoneros,
O de mercados o puestos de frutas,
Ellos no tienden a andar caminando por ahí, y mucho menos
Con una pita y un papelito en amarrado en uno de sus extremos.
No quiero contar historias de mentiras,
Ni a medias, si no estaría escribiendo,
Así que puedo decirles que lo único que hice fue recoger el limón
Y esta vez no fui tan curioso como debí haber sido,
No leí el papelito para evitar tener que llamar a alguien
Por si las dudas, uno nunca sabe quien deja perdido un limón.
Arranque la pita y me la metí en la bolsa de la camisa,
Con todo y papel, quedo guardada ahí,
Y me hice el loco por un momento,
Tome el limón en mis manos y lo sentí
En cierta forma, el hecho de que anduviera de antojo
Y que la limonada sonara para mí, tan deliciosa,
No me hizo pensar ya en el papelito que llevaba en la bolsa.
Cerré los ojos e imagine como sabría mi limón
Como quedaría mejor, sí con mucha azúcar
O sin nada de ella.
Puedo decir que me emocione un tanto con la idea
De la limonada, y del limón, que pensé
En un puesto de limonada,
Que crecería, y crearía puestos de trabajo
Para tantos otros sedientos de limón como lo estaba yo-
Abr los ojos de nuevo, y mi corazón dio un vuelco
Mi limón me mira con ojos bellos,
Nunca había visto que tuvieran ojos, ni nada por el estilo
Lo sorprendente fue como abrió su boca,
Señores, “el limón tenia boca”, y me dijo
LEE EL PAPEL.
Mis manos no quisieron moverse de su lugar
La sorpresa fue tanta, que mis movimientos se quedaron estancados
Pero lo repitió otra vez, y desperté de mi sueño de limonadas
Y de limones parlantes,
Tome el limón en una mano, y sus ojos y boca habían desaparecido
Saque el papelito, jalándolo por la pitita
Y decía con letra grandota,
EL SIGUIENTE LIMON ME PERTENECE
SI LO ENCUENTRA UN DIA DE VERANO
PERDIDO EN UNA CALLE
NO ERA QUE LO HUBIERA PERDIDO
SIMPLEMENTE, QUERIA QUE ME LO DEVOLVIERAN
COMUNIQUESE CONMIGO,
EL LIMON SABRA COMO
Tire el papel, y cerré mis ojos
Quite él rotulo de mi tienda de limonada
Guarde mi antojo en un cajón
Seque las lagrimas de las personas que iban a trabajar conmigo
Y no lloraba porque aun no lo amaba,
Simplemente me frustraba, el sentimiento ese de saber que lo hubiera podido amar
Si no fuera como dice una canción por ahí, TARDE
Si la vida te da limones, antes de imaginarte la limonada. Pregunta si no son de alguien.
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