Cronopio Melomano

Saturday, December 23, 2006

un semaforo

Hoy se acerco un señor en un semáforo,
Y me pidió una moneda,
Me dio una magnifica excusa,
Que no pude negarle la moneda, al sentirme identificado.
Me dijo al oído, que había perdido el corazón
Y que estaba juntado para ver si conseguía otro.
Le dije que descorazonados habemos muchos, pero como el ninguno.
Pararse en un semáforo y pedir dinero por eso,
Me dijo que la vida le había enseñado,
Y abrió su camisa,
Vi la cicatriz inmensa, y fue algo asombroso
Saber que ahí hubo un corazón,
Que a el le había pasado,
Que lo había perdido.
El mio es una roca de azul de vez en cuando, le comente,
Y me dijo que empezara a amar,
Que el suyo cambiaba de colores,
Y que pronto empezó a volverse azúcar,
Un medico goloso, le dijo que había que operarlo
Y despertó a media anestesia,
Y vio algo que no podía describir,
Un medico haciendo algodones de azúcar,
En la sala de operaciones.
Y fue en ese momento que se dio cuenta,
Que su corazón estaba en el estomago ajeno
Y que jamás lo podría recuperar.
Le ofreció la salida de conseguirle uno de cartón
Pero tenia que pagar la próxima operación.
Saque de mi bolsa una ficha,
Y di un paso de más,
Volteé a preguntarle, si me podía dar el numero de su doctor.

Olvide como llorar

“Olvide como llorar”, y la frase vino a mi cabeza,
caminaba para entender,
como ciertas cosas hacen hoyitos en mi,
que me molestan en días de luna como hoy.
Ni siquiera luna llena, sino luna con forma de uña.
Robé un poco mas de aire,
con un suspiro le robe al ambiente un poco más.
Y fue cuando cayó a mi cerebro,
llevaba tambores y pancartas, tal manifestación por tierras
o por educación.
El olvidar llorar se volvió su grito de guerra,
y me hizo darme cuenta,
que no se llorar.
Que mis lagrimas están desempleadas,
que se secó mi rio de lloriqueos.
Me acordé que había leído unas instrucciones para llorar,
busque el libro y no lo encontré,
me pellizque y solo me dejo un morete.
Trate de pegarme, pero fue inútil convencer a mis manos.
Empecé a buscar recuerdos pero los tenia bajo llave,
y ya la había perdido,
y el único que encontré estaba mas ocupado,
buscando en la guía un psicólogo, que con ganas de ponerme atención.
Me acorde de mi disco del día x,
y no lo encontré.
Le pregunte al polvo y solo me hizo estornudar,
y lo perdí de vista.
Y se acerco la realidad, y me di cuenta,
que no llorare a mis muertos
y la dejare ir sin pelear.
Se me saldrán lagrimas, pero ya no caerán,
violare la ley de la gravedad,
y se esfumaran al cielo.
Mi problema no esta resuelto,
y mi corazón duele mucho.
No encuentro las cicatrices
y eso es mas preocupante,
porque al parecer no están ahí
¿Talvez viví de mentiras?
o ¿fue un largo juego de simulación virtual?
no hay bulla en mi cabeza y me doy cuenta
que he oido cuatro canciones
y no me he dado cuenta.
Creo que mi cabeza hoy tiene alas,
y los manifestantes descansan,
dejando a la vista mi realidad
olvide como llorar.

Saturday, December 16, 2006

Dulce melancolia

Estoy sentado en esta parada de buses
esperando que pase la próxima nube.
Y me lleve a un viaje movido
lleno de algodón y cielo.
Sentado se acerco la locura
y me coqueteo con sus ojos dulzones.
Pero al ver que no estaba solo,
que la melancolía estaba a mi lado,
se puso a platicar con ella.
Platicaron de los humanos, y de cómo juegan con ellos.
Se hablaron de amores furtivos
de sueños rotos, y sacaron cuentas de corazones rotos.
La melancolía vio pasar un pequeño perro,
que parecía estar mas loco que la locura,
y se lo hizo notar, ella dijo que no podía ser cierto
y se fue a perseguir al perro, mientras las melancolía observaba entretenida.
Suspiraba a cada momento,
y me encontró un suspiro, y me sentí ausente.
Volaba en una marea muy densa
y nadaba en un aire lleno de nubes.
Cuando me di cuenta
la nube que tanto esperaba, se había ido
y me había dejado, solo.
Diciéndole adiós con la mano, a esta dulce melancolía.

Thursday, December 14, 2006

Noche al fin

Y yo que creí que ya era de día, y aun es de noche,
luces de estrellas que brillaron un poco mas que el sol, me engañaron por momentos.
Estoy a oscuras, con el corazón partido en la mano,
Y con la otra busco donde apoyarme, aunque casi no sienta ya.
Y soñaba anoche, o mejor dicho esta noche,
Se sueña despierto durmiendo.
Me alquilo por pedazos de luz,
Busco debajo de las piedras, una luciérnaga moribunda.
Y encuentro grillos que me recuerdan que es de noche.
Busco focos perdidos, y encuentro canciones de cuna.
Y busco a alguien ahí, y encuentro cartones de leche con imágenes de personas perdidas.
Deje de buscar y me senté en la esquina opuesta a donde estaba antes,
Cerré los ojos y en mis sueños había luz,
Tenue pero al fin luz.
Ayer dormí un poco, para atenuar mi necesidad de luz,
Ayer jodi un tanto al grillo que sigue cantando
Anda melancólico y me cuenta historias de desamor,
Que me pegan la melancolía.
Y todo sucede a luces apagadas. A corazones perdidos.
Me llego un aire que soplaba de arriba,
Me despeino un tanto, lo cual no importa,
Sin luz los despeinados y los peinados lucen exactamente igual.
Me comí el grillo, tenia hambre, y su canto me aturdía,
Me recordaba que la luciérnaga no aparecía
y esta noche, que luce eterna
ya no hay quien me haga compañía.

Friday, December 08, 2006

mi barco de papel

Voy sentado en mi pequeño barco de papel que va hacia la nada,
Mi barco es algo frágil, y esta lleno de pensamientos,
Cada uno escrito con una letra que poco a poco reconozco,
y me doy cuenta lo frágil que es.
Cada oración que veo ahí, me recuerda cada uno de esos momentos,
Recuerdos de tiempos lejanos, donde todo tenia un porque,
Mientras mi viaje tiene destellos de vida.
En las noches, me siento a observar las estrellas,
No llevo prisa, pero me siento ansioso,
Porque que tengo que cuidar mi barco a todas horas,
Para que no se entre el agua y me lo despedacé.
En las tardes, todo se ve tan naranja,
Lo atardeceres me dicen que tenga paciencia, que la nada no esta lejos
Y que mi barco aguantara a llegar a tierra firma, para que lo pueda secar al sol.
Descanso en una playa, y un recuerdo trata de fastidiarme tirándome arena en los ojos,
Huye y se esconde tras una roca que le sirve de refugio, mas no de escondite.
Lo tengo entre mis manos, mientras veo como a poco desaparece,
Fue como si nunca hubiera existido.
Últimamente me ha pasado, recuerdos que desaparecen entre mis manos,
Pero todos se llevan un pedazo de corazón.
Hace poco leí en un diario, que había forma de acabar con ellos,
De no tenerlos, pero me daba una dirección de Internet que por desgracia olvide.
Mi barco esta seco de nuevo, y me preparo para empezar,
Muchos de los versos que estaban escritos, se han vuelto una masa de color azul
Y ahora mi barco es azul, como mi alma que va a azul.
Hoy solo quiero recostarme y no pensar.
Perderme un rato en las estrellas, jugar con un par de cometas,
Saltar de nube en nube y platicar con la luna.
Hoy solo quiero saber que estoy yo, y que estoy vivo.
Mientras busco la manera de ir guardando recuerdos por instantes,
Antes de que desaparezcan con otro pedazo de mi corazón.
Apunte en mi diario que tengo que ir a buscar un doctor,
Antes de que no tenga corazón, para que me consiga una bomba,
Algo que vuelva a bombear sangre a mi cuerpo,
Y sentimientos a mi alma.
Antes de que tenga que buscarme una piedra roja,
Abrirme el pecho, y metérmela en vez del corazón,
Seria feo salir a la calle, y que la gente se de cuenta que no tengo corazón,
Asustaría niños, y me volvería hasta leyenda urbana,
Hay que disimular, aunque no se sienta igual.
Pero esta noche no, esta noche, volare,
Y esta noche dejare que la brisa me lleve a donde quiera.
Veré mi barco azul y me diré
Hacia la nada iré, y de nada, nada, me preocupare.